Con los rayos primeros
parte la poesía,
el sol a sus espaldas
emerge del oleaje
trazando una estela
como varita mágica,
que va, tornasolada,
recogiendo el roció
despertando las flores.
Préstame poesía
esa varita mágica
para esbozar un verso
trémulo como la brisa,
para sentir dichoso
que la vida prosigue
cuando con toda el alma
te doy los Buenos Días!