Prisionero (A unos ojos)
Salir al paso
de unos ojos claros
fue el comienzo
de esta pasión.
Salir al paso
de unos ojos claros
fue el comienzo
de esta pasión.
Indudablemente la poesía no consiste en recordar o buscar palabras. No. Es un brotar inesperado e impetuoso que desborda y anega. O acaso una erupción, un movimiento telúrico y su correspondiente Tsunami. Podrá surgir, bien, mal o regular pero de una sola vez.
Lopesca y culterana tu simiente
Hoy prima y rima en tierras españolas
Por ti habitadas, cerca de las olas,
La sal no mata y quien lo niegue miente.
Africa eterna:
tu atardecer trasciende
mediterráneas olas
y sus cordeles de oro
enlazan el muro, blanco,
de esta terraza mía.
Habrá que dejar unas estrofas
atadas al balcón sobre el Poniente,
que forman cien estrellas reunidas
para irradiar su luz incandescente.
La conmemoración del centenario de la creación por Don Manuel de Falla de la partitura de su ópera Vida Breve, da lugar a poder relacionar el discurrir del tiempo con música y poesía.
Donde estarán mis brazos
cuando tu amor se evada ?
Cuando la Vía Láctea
regente despedidas ?
Es el viernes más cálido
que hubiera vivido nunca,
como si ya habrías vuelto
de tu ausencia postrera.
La mano, antes firme,
ahora, temblorosa,
se afana, sin sonrojo,
a trazar, vacilante,
unas letras amantes
que engendren palabras
como siempre lo hiciera.
Tomar prestado un título
no es engaño,
del ¿Preludio ¿del compositor Claude Debussy,
si la música ha precedido
a las palabras
y en ocasiones la secuencia
es la contraria:
son palabras las que generan
melodías.