Pavana para una Sierra Difunta.
( A la Sierra Bermeja )
Si, tomando el título, casi , de Ravel y su pavana. Predilecta de grandes orquestas, de todas las latitudes y que se precian de serlo.
Vaya este llanto sentido por cuanto hemos perdido de nuestra Sierra Bermeja.
Habrán de pasar cien años , acaso, hasta que recobre su verdad el poema en el que digo :
“ la Sierra Bermeja viene
de rosa pálido y oro,
haciendo honor a su nombre,
su abolengo y al decoro”.
Ese era su traje de luces hasta hace pocos días. Con los rayos de sol de las mañanas! Más hoy, inmensa desgracia, se viste de catafalco y negro! Como los difuntos . Y le acompañan susurros de silencio. Tras el fragor del combate contra el fuego ! Si Lorca dijo “ verde que te quiero, verde “. Ahora habría de decir…..negro no te quiero negro !
Has sido Sierra Bermeja ,mi primera mirada tras el amanecer y la última al caer la noche ! Y aún así : estabas celosa las veces en que giraba el cuello para mirar la mar ! Olvidabas que fue La Mar la que me trajo aquí e hizo que te conociera ! Que ascendiera tus laderas, conociera los “pinsapos “ y descansará en el refugio al pié de tu cumbre ! Tantas veces en cuantos años ,has sido parte preponderante de este mi paisaje Mediterráneo. No entiendo vivir con esta negrura y muy probablemente mis ojos no volverán a verte como eras. Pero puedes estar segura te llevaré en mi memoria: más allá de las nubes …donde no llegan ni el soplo del viento ni la chispa del fuego!