Saltar al contenido

Requiem ante una Pandemia.

Tañen a luto todos los campanarios
un "De Profundis" de tantas catedrales,
en este Réquiem ante una Pandemia
que alcanza límites, ya, universales.
Nos amenaza con quitarnos goces
que el cuerpo nos brinda, cariñoso,
estrechar manos, fundir abrazos,
compartir la copa de un vino generoso.
Donde quedaría el beso soñado?
El cuerpo húmedo que de amor latía?
Aislado, solo, transido de tristeza,
donde no llega ese rayo de alegría.
Quiero abrazar a mis hijos, a mis nietos,
volver atrás y recuperar su aliento.
Andar caminos sin hallar barreras
y que en las playas juguemos con el viento.
Como de lejos puede estar la dicha
de silenciar las notas de este llanto?
Cuando irrumpa, radiante, un "Té Deum"
y desde el infinito envíenos su canto!

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *