Saltar al contenido

Poema – ¿Musa o Sirena?

Henchido de mirar la mar

absorto sigo, al pensamiento

que surcar consigue

todas las distancias marineras.

Escudriñañdo detrás de cada ola,

salpicando de sal a mis quimeras.

Entre ellas surges Tú, iluminada

por la claridad meridiana del celaje,

que no consigue albergar nube alguna

que pueda traer sombra a mi atalaya.

No, no habrá manera de perderte

porque Tú te aproximas cada día.

Y yo sigo anclado a tu presencia

igual que las arenas a la playa.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *